lunes, enero 14, 2008

Innovando

Un módico revuelo causaron algunas de las palabras del ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva en este reportaje (bastante poco incisivo, para mi gusto. Y el patético amonestador mediático Nelson Castro tampoco estuvo muy brillante, como era de esperar, al entrevistarlo en El Juego Limpio).

Las primeras voces de alarma se escucharon en la blogósfera, por los pagos del Criador de Gorilas y de nuestro amigo el Dotor. Ya la cosa cambió de escala con esta nota de Atilio Borón, correctamente descuartizada por el Lic. Baleno. Y hoy Norma Giarracca hace un muy buen aporte desde las ciencias sociales, tratando algunas cuestiones de fondo.

Incursionando por una vez en mi lado profesional (*), aporto un comentario sobre la nota de Borón. Éste menciona al "célebre (?) Informe Gulbenkian" como "prueba" de que "el viejo paradigma "newtoniano-cartesiano" entró en crisis en las propias (mal llamadas) "ciencias duras". Y cita como uno de los redactores de ese Informe a Ilya Prigogine, Premio Nobel de Química en 1977, quien tras sus notables aportes a la termodinámica se dedicó a llevar sus nociones de caos, desorden, estructuras disipativas, etc., al nivel de paradigma universal, lo que le valió p.ej. ser entrevistado en el programa de M. Grondona. Y con lo cual (en mi humilde opinión) le abrió un campo fértil a la charlatanería y a múltiples formas de pseudociencia (los interesados pueden leer este artículo). Flaco favor le hace Borón a las ciencias sociales pretendiendo desacreditar la metodología de las "ciencias duras" con esos argumentos de cuarta.

No veo por qué los que se dedican a las ciencias sociales y humanidades deberían alarmarse por las opiniones de Lino Barañao. Al fin de cuentas, el Conicet tiene sus áreas y sus respectivas comisiones de evaluación perfectamente separadas y no se me ocurre que el ministro vaya a meter mano ahí, por más que "a veces los trabajos en sociales le parezcan teología". Más bien habría que fijarse en cuáles son los objetivos de este ascenso de rango de dependencia, de Secretaría a Ministerio. Porque como bien dice Primo Louis en un comentario al post del Criador, la cosa pasa por otro lado:

Barañao está ahi para otra cosa, el énfasis está puesto en la transferencia. No le importa otra cosa, la gente de ciencia básica también está que trina.

Para entender un poco más del asunto, mejor recurrir a los amigos del Grupo de Gestión de Políticas de Estado en Ciencia y Tecnología, que suelen tener las cosas bastante claras:


Cristina Fernández de Kirchner / Lino Barañao

La decisión política de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de crear el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva (CyT) ha sido una medida que jerarquiza al sector, históricamente recluido a nivel de una Secretaría ejecutiva pero nunca de definición de políticas.

Como todos sabemos, el Dr. Lino Barañao ha sido la persona designada para conducir ese Ministerio. Por el momento no se conoce si para ejecutar sus acciones el nuevo Ministerio de CyT quedará supeditado a las decisiones del GACTEC (Gabinete Científico Tecnológico), o si tendrá independencia en la decisión y ejecución de proyectos y podrá contar con cualquier organismo nacional de CyT para esos menesteres.

De cualquier manera, el nuevo Ministerio seguramente tendrá otro protagonismo en un escenario que suponemos más favorable, con mayor autonomía y con poder de decisión para incidir en los rumbos a tomar. Por manifestaciones públicas de la presidenta Fernández de Kirchner y del ministro Barañao, es claro que la interacción público-privada (habitualmente subsidiada por el Estado) continuará siendo uno de los ejes de la políticas en CyT de la nueva administración, como sucedió en el período 2003-2007 en el cual se incorporaron prebendas al sector empresario (Ley 26.270), que complementaron a las definidas en la década del '90 (Ley 23.877).

El problema de esas leyes es que no son sólo para Pymes (que sería lo razonable) como habitualmente se dice, sino que a esos beneficios pueden acceder empresas de cualquier envergadura y origen de capitales siempre que tengan domicilio legal en el territorio argentino. Es decir, en el marco de esas leyes se pueden otorgar subsidios a quienes no lo necesitan (grandes empresas nacionales y multinacionales).

Este eje público-privado subsidiado se confirma con la reciente ampliación a 40 millones de pesos del cupo de crédito fiscal (subsidios) destinado a fomentar la inversión de las empresas en proyectos que involucren CyT; proyecto aprobado recientemente por la Cámara de Senadores que fuera promovido por el ex ministro, Lic. Daniel Filmus (Página/12 del 13-12-07 - web del Ministerio de CyT).

Sin embargo la jerarquización del sector CyT promovida por la Presidenta de la Nación obviamente no puede quedar supeditado al desarrollo de sólo un sector de la sociedad, sino de todos y, en especial, del sector público. En efecto, la sociedad, que es quien financia la CyT, debe apropiarse del conocimiento y no ser sólo un espectador marginal del festín de otros.

En ese sentido, en su mensaje ante la Asamblea Legislativa, la Presidenta hizo reiteradas manifestaciones a sus políticas de inclusión social, hecho que permite pensar que el desarrollo de emprendimientos públicos no va a quedar nuevamente en la nada. Así, fue muy clara cuando dijo: "Yo no he venido a ser Presidenta de la República para convertirme en gendarme de la rentabilidad de los empresarios; que se olviden".


Un toque de optimismo le han puesto los colegas del Grupo de Gestión al último párrafo. La verdad, yo prefiero ver para creer.


(*) Aclaración: en mi vida pre-blogger fui compañero de estudios de Lino Barañao en Exactas de la UBA, y actualmente sigo siendo doctor en Química (es decir, colega suyo).


Post Scriptum: tras largas meditaciones logré redactar un comentario a este post de Manolo. Lo agrego acá como aporte.

Manolo:
Muy atinado tu punto de vista. El debate sobre estos asuntos se puede disparar en múltiples direcciones, así que voy a tratar de ir a lo concreto según mi criterio (que todavía lo estoy elaborando). Para mí, la creación del Ministerio apunta sobre todo a darle una mayor escala a lo que ya venía haciendo la Agencia de promoción científica y tecnológica (ver aquí), que estaba justamente a cargo de Barañao. Y en la página del Ministerio (clickear en Información Institucional) está el artículo de la ley 26.338 que fija las funciones y objetivos que tiene que cumplir. Está claro que el énfasis está puesto en el desarrollo y la innovación tecnológica para el sector productivo, sobre todo en las 3 áreas famosas (SW, BioT y NanoT). La preocupación del Grupo de Gestión que cité en mi blog parece justificada porque no se dan precisiones sobre proyectos prioritarios a ser desarrollados por los entes públicos.

Igualmente no hay que olvidar que la mayoría de los entes estatales donde se realiza investigación (INTI, INTA, CNEA, CITEFA, CONAE, etc.), además de las Universidades, quedan fuera de la órbita del nuevo Ministerio. La ley establece una coordinación y evaluación de sus actividades por parte del MINCyT, pero es de suponer que sus actividades van a seguir siendo básicamente las mismas. Y en cuanto al Conicet (que financia a investigadores tanto en ciencias "duras" como "blandas") no tengo noticias de que vaya a haber ningún cambio.

Entiendo que cada uno mire las cosas desde su propia quintita, pero suele perderse de vista que hoy en día muchísimos proyectos necesitan ser encarados en forma multidisciplinaria. Por ejemplo, supongamos una comunidad de una provincia X que sufre problemas de falta de agua, degradación de suelos, falta de fuentes de trabajo con consecuencias de emigración, drogadicción y delitos entre los jóvenes, etc. Un proyecto integral que intente mejorar esa situación tiene necesariamente que involucrar una cooperación o una simbiosis (usando al título de tu post) entre especialistas en áreas técnicas Y sociales.

23 comentarios:

Ulschmidt dijo...

Impecable, Doctor!!
La verdad - y es mucho pedir, ya se - a uno le gustaría en alguna rama determinada de nuestra industria tecnológica ver surgir uno de esos "clusters" (por darle un nombre) donde la Universidad emite gente que va a las empresas o funda la propia e interactúan todo el tiempo entre sí, exigiéndose cosas mutuamente, como cuando emergió el Silicon Valley. Y esa suerte de torbellino creativo suele ocurrir sin subsidios de por medio.

Anónimo dijo...

Ta bueno el debate, ahora si no habia un ministerio de ciencia y tecnologia, las expresiones de Lino Barao, pasarian totalmente desapersividas o no tendrian ninguna contestacion de ni Atilio Borom-bom...ni de casi nadie.
Esta discucion entre las ciencias duras vs las ciencias blandas, deviene porque la dijo un ministro de CIENCIA Y TECNOLOGIA.
Pareceria una obvidad pero me alegro de ello.

Lic. Baleno dijo...

Celebro estar de acuerdo con usted. Me gusto tambien lo de Giarraca hoy en P12, bastante menos subida al banquito y continuando el debate sin pretender, como Boron, cerrarlo.
Esa es la actitud!
Igual ya le anticipo que la corporacion se queja de que Cristina parece querer una ciencia "comercial" que haga cosas vendibles... habra que escuchar cada cosa, pero bueno, por fin se debaten temas que hace 20 años que estaban en el freezer.

Rafa dijo...

Sr. U:
¡Gracias por el elogio! Coincido con su deseo y creo (tengo la intuición, por lo menos) que en áreas como software o biotecnología no estamos demasiado lejos de ese "status". Tenía ganas de referirme al proyecto de clonación de la ternera Pampa, en el que intervino el propio Barañao y que según parece fue costeado totalmente por un laboratorio privado. Igualmente yo no me opongo a que se otorguen subsidios para desarrollos tecnológicos privados, pero debería asegurarse que los fondos entregados por el Estado sean reintegrados en forma de beneficios para la sociedad. Lo que en nuestro país ha sido más bien la excepción y no la regla.

De paso Sr. U, ¿alguna vez escribió sobre Prigogine? Me gustaría leer algo suyo sobre él o sus teorías.

Anónimo (12:15):
Voy a elegir un enfoque crudamente materialista: el hecho de que haya ahora un Ministerio del área hace que muchos olfateen un aroma a $$$, y ahí también entran en juego las luchas por el prestigio "científico" y surge una polémica absurda de ciencias duras vs. blandas. En particular lo de Borón me parece deplorable... Por supuesto que la creación del Ministerio es un hecho para aplaudir, ahora hay que ver qué políticas concretas se van a llevar adelante.

Lic. Baleno:
Je, no coincidiremos en fútbol pero en esto sí. Brillante su post. Es verdad, ya escuché varias veces lo de la "ciencia comercial" y la gente del Grupo de Gestión que cito en el post abre el paraguas al respecto. No me opongo a que se incentive la transferencia de tecnología a los privados, pero sería lamentable que la ciencia básica o "no vendible" que se desarrolla principalmente en los entes estatales o en las Universidades fuera relegada a un plano secundario. Y por supuesto, bienvenido el debate sobre estos temas, olvidados y "freezados" durante tanto tiempo.

Gracias por los comentarios y abrazos para todos.

manolo dijo...

Jorge
Como siempre brillante, iba a comentar pero me pareció que no solo era largo sino polémico.
Por eso preferí publicar la respuesta en el blog y linkearlo
Como vos decís, hay demasiado “aroma” a que el problema no es el Honor, sino la Codicia.
Semejante fangote, 0,60% del Presupuesto, ¡y no poder mojar! ;-P
Un abrazo,

Unknown dijo...

Es indudable que un paso se dio, y a mi entender para adelante, pero coincido con ustedes que sera bueno esperar y ver como se desarolla en politicas.
Jorge, soy de Rio Cuarto y la explosion en la universidad nacional, es algo muy similar a lo que no queremos, que los proyectos de investigacion o trabajo privados (encima rentables, y alli todo mi objecion ya que la explosion se debia a un proceso de extracion de aceites con hexano pero para una gran empresa de origen Belga) sean pagados con fondos publicos.
Pero si fuera para acompañar el desarrolo "comercial" de las cosas vendibles, no es algo contrapruducente con los intereses como Nacion.
Entonces el proximo debate sera como articular, lo "no comercial" y lo "comercial". Jorge acota con razon "sería lamentable que la ciencia básica o "no vendible" que se desarrolla principalmente en los entes estatales o en las Universidades fuera relegada a un plano secundario. Y por supuesto, bienvenido el debate sobre estos temas, olvidados y "freezados" durante tanto tiempo" Y viendo lo que el Lic. baleno nos datea: "Igual ya le anticipo que la corporacion se queja de que Cristina parece querer una ciencia "comercial" que haga cosas vendibles".
Veo que esto es tan importante como el de los muchachos de las ciencias duras vs los de las ciencias blandas.
Ya que no deseo que el debate se plantee en el exito o no de una heramienta como es un ministerio, por sectores que solo quieren ver a la Argentina, no muy desarrolada...que son los mismo de siempre y los que tanto conocemos.
Saludos... Manolo y yo que pense que el Ministerio de Planificacion y Obras Publicas era el mas codiciado, pues ahora todos querremos ser cientificos o mejores estudiosos...

Musgrave dijo...

Lindo temita, Jorge para el debate. Mi único contacto con tu condiscipulo fue en una seminario en honor Chudnovsky, del cual hay una crónica postera en F.P.

Tengo un picadito de puntos.

Hace un meses, Aghion prof de harvard y asesor de Segolène Royal decía, que Francia quedó muy atras en la frontera tecnológica y las innovaciones por priorizar más la educación media y técnica por sobre la universitaria, como en USA.

Digamos que sin universidades haciendo ciencia básica tendremos problemas.

Leyes de promoción exclusivas para PYMES, es todo un tema. Hay suficiente cantidad de Pymes innovadoras? No habrá un tema de la fobia de los funcionarios a la subejecución de los programas por escasez de proyectos?

Sin el apoyo de los grandes, las leyes hubieran sido aprobadas?.

Llamesmolo subsidios, compre nacional, fontar, foncyt, fonsoft como quieran, sin apoyo estatal no habrá suficiente masa crítica innovativa para que tenga impacto macro.

Ahora hasta Gabriel Sanchez, actual presidente del IERAL de la Fund Mediterranea, escribe a favor del fondeo y apoyo público a la innovación.

Don Segundo dijo...

Como tantos otros temas de la actualidad nacional, no debería quedar librado a la correlación de fuerzas en las cúpulas, ¿no?

Hay que ejercitar la participación cada vez más amplia, me parece, modestamente.

Esto me trae a la memoria un post de Manolo (¿o un comentario?) donde decía que los que militan son los más predispuestos a hacerlo, no necesariamente los mejores.

Necesitamos cada vez más gente, más predispuesta.

Anónimo dijo...

Efectivamente, como (modesto) investigador en ciencias sociales, me da vergüenza ajena la "defensa" que de ellas hace Borón.

Sin que signifique una adhesión política, en lo de que los de cs soc./humanidades a veces parecen teólogos, estoy de acuerdo con el ministro.

Sin ser un monista metodológico, creo que el monismo metodológico tal vez sea imposible, pero es estúpido estar en contra de él por principio, sólo para "ser diferente" -lo que suele ser una forma de disimular la pobreza intelectual.

Rafa dijo...

Manolo:
Como verás, agrego mi comentario a tu post como P.S. en éste. ¡Los blogs sean unidos!

Fabricio:
Es una enorme y terrible tragedia lo que pasó en tu ciudad, y si se quiere más dolorosa aún para los que nos sentimos colegas de las víctimas. Por supuesto que ese tipo de vinculación entre lo público y lo privado es lo que NO se debe hacer.

Concuerdo en que los desarrollos con fines comerciales que se financien en parte con fondos públicos, no tienen por qué ser incompatibles con los intereses nacionales, pero siempre que redunden en beneficios para la sociedad. Ojalá que la creación del Ministerio sirva para articular un sistema de ciencia y tecnología integrado donde se complementen lo público y lo privado, lo básico y lo aplicado, la formación de recursos humanos y la creación de empleos de alta especialización, etc. Y también que genere una sana competencia por los recursos a través de mejores proyectos y mayor capacitación de los investigadores y tecnólogos. En fin, soñar no cuesta nada.

Gracias por los comentarios. Un abrazo.

Musgrave dijo...

bueno Jorge, esto se pone cada vez más divertido. Estoy terminando de leer unos escritos de Ivancich, en un articulo analiza la politica en la universidad del 13 al 85.

El debate en los años de democracia pasaba por la opción autonomía universitaria-estado planificador. No se porque me parece que esto vuelve, de a poquito pero vuelve.

Acepto tu invitación a soñar, soñemos con un Estado Planificador y una Universidad a su servicio

Rafa dijo...

Musgrave:
Nº 1: Estuve leyendo tu post y me gustó mucho (así que lo pongo aquí), me lo perdí en su momento.

Buen dato lo que contás de Aghion. El problema nuestro es que no podemos descuidar nada, los indicadores de resultados de educación media que salieron hace poco son paupérrimos, y en educación técnica hay que empezar de nuevo. Y algo que se suele olvidar sobre ciencia básica es que es un excelente ámbito de formación para investigadores que más adelante se dedicarán a aplicada y tecnología.

Lo de las leyes de promoción sólo para PyMEs daría para otro debate. Al menos debería haber mecanismos (no sé si los hay) para evitar que se subsidie a empresas que no lo necesitan. En la página de la Agencia (puse el link en el P.S., hay que buscar en Novedades - FONTAR) se puede indagar en los proyectos que se presentaron al llamado del año pasado, están los aprobados y los rechazados. Coincido en que se requiere apoyo estatal para que se llegue a una masa crítica en innovación, pero no sólo en cuanto a financiación sino también en la fijación de una estrategia y de objetivos claros a mediano y largo plazo.

Nº 2: ¿Está en Croqueta Digital lo de Ivancich? Ahí leí algunas cosas muy buenas de él. Sobre el debate que comentás, recuerdo que p.ej. Jauretche era muy crítico de la Universidad autónoma de la "época de oro" 1956-66 porque la veía ajena a los problemas nacionales. Creo que después de la (triste) experiencia de las últimas décadas podemos retomar ese debate con más elementos de juicio. Todos aprendimos que no se puede tolerar el autoritarismo, y que la producción de conocimiento no puede hacerse ignorando la sociedad en la que se vive.

Gracias por tus comentarios y por acompañarme a soñar. Un abrazo.

Musgrave dijo...

Jorge, gracias por linkearme.
Lo de Ivancich lo leí en Escritos Peronistas el libro que editaron con articulos suyos de Unidos, Visperas, etc. La versión original fue publicada en Unidos, Año 6 Nro. 22, diciembre 1990.

un abrazo

Unknown dijo...

Jorge, A. Jauretche distinge la diferencias entre INTRUCCION y EDUCACION. El decia que los recibidos eran bien intruidos en la Universidades pero no los educaban o no le señalaban el rol historico que cada uno debe cumplir como profecional conjugandose con los intereses de la Patria.
Un debate muy bueno...que barca las ciencias, la pedagogia, la sociologia y la cultura.
Es decir tenemos muy buenos intruidos e intructores, pero alejados de los problemas y roles que deben realizar.

Anónimo dijo...

Jorge, me parece que el Invap ya demosró hasta la saciedad su capacidad de hacer ciencia (bastante) básica y rentabilizarla ¿no? Bueno, entre las muchas cosas "menores" que desarrollaron están las turbinas de generación eléctrica eólica baratas y adaptadas al viento arrachado del Sur. El gobierno chubutense de los 90 prefirió las españolas, más caras y de menor vida útil ¿por qué será? ¿tendrá la posibilidad de cometear algo que ver? Otra (no la va a encontrar en su sitio porque son desarrollos de ideas que acercan inventores particulares): un motor a turbina para aviones livianos (tipo Cessna) que disminuye el peso a la mitad y dura el triple (mire si habría mercado). Como estas, en el diario Río Negro salen mes por medio.
Un abrazo.

Ulschmidt dijo...

jorge, lo que pueda escribir sobre Prigonine lo escribiré en este barrio. Lo leí, si, en cuanto a su teoría del caos, pero me gustaría leer más no de lo que lo hizo célebre sino de esos trabajos que le valieron el Nobel. Supongo que va para el lado de la termodinámica de Osanger.

Rafa dijo...

Don Segundo:
Totalmente de acuerdo. Cuanto más participen y se involucren los ciudadanos en estos temas, mayor será la capacidad de la sociedad de influir en las decisiones para que no se termine favoreciendo a unos pocos "bien ubicados".

"Aguanten...":
No quiero meterme en profundidades epistemológicas, pero creo que en otros blogs se está hilando demasiado fino sobre lo que dijo Barañao de las ciencias sociales como teología. En el link que puse al hablar de Prigogine, el matemático Zuppa recuerda el principio de Parménides: justificar lo que se dice, el cual es válido tanto para las ciencias "duras" como para las sociales. Ocurre que las primeras se llaman "duras" justamente porque los criterios de justificación son muy estrictos.

El problema que veo con las ciencias sociales es que la validación del conocimiento a veces es demasiado difusa o flexible, y esa es la única "crítica" que para mí les hizo Barañao. También influye la existencia de distintas escuelas, por no hablar de cenáculos o camarillas, que suelen compartir un mismo lenguaje o los mismos criterios metodológicos.

Coincido en que es absurdo oponerse al monismo metodológico por principio, aunque cada área tenga sus particularidades. Al igual que a sus colegas de ciencias "duras", a los científicos sociales se les deberían exigir requisitos de rigor y objetividad aunque no tengan que demostrar teoremas, por ejemplo.

Perdón por la demora en contestar. Gracias por los comentarios, un abrazo.

Rafa dijo...

Musgrave Nº 3:
Gracias por el dato de Ivancich, después te contesto el amable mail que me mandaste.

Fabricio:
En ésta como en tantas otras cosas, Don Arturo la tenía clarísima. Desgraciadamente esa etapa de la Universidad "cientificista" que criticaba no fue superada en el sentido que él proponía, sino clausurada por el autoritarismo aberrante de Onganía y su Noche de los Bastones Largos. Con lo cual el país retrocedió varias décadas en materia científica. Hoy día creo que tenemos el deber de replantearnos el papel de la "instrucción" que recibimos, frente a la sociedad y a la Nación.

Gracias y abrazos.

Rafa dijo...

Roberto:
El INVAP es un muy buen ejemplo de "empresa de base tecnológica", aunque sea totalmente estatal. Habría que profundizar un poco sobre en qué medida algunos de sus logros se basan en conocimiento o "know how" generado por un organismo postergado, como es la CNEA. Pero ese es otro tema.

Sr. U:
No sé si otros visitantes de este blog aceptarán esta propuesta de lectura veraniega, pero en el sitio de los premios Nobel encontré esta autobiografía de don Ilya y su discurso al recibir el premio. Ahí creo que están bastante bien expuestos sus mayores aportes a la ciencia. Una pequeña corrección: el científico que cita el matemático Zuppa y en cuyos trabajos se basó Prigogine, es Lars Onsager.

Gracias de nuevo, y más abrazos.

Unknown dijo...

Jorgue.
Un replanteo de ciertos contenidos catedraticos es NECESARIO.
Relativamente se dio un avance con el paso a retiro de la LEY de EDUCACION del 95 Mememista.
Pero en los debates sobre la misma, en mi ciudad estube presente y los sectores de Docentes solo el eje lo ponian en lo salarial, de paso en aquellos meses la OIT decia que la CTA debia tener reconocimento juridico en cuanto a su personeria y desde la CETERA empezaban a presionar.
Asi fue que de la parte de formacion y contenidos educativos quedaron lejisimos del debate debate.
Me parece que no le interezaba mucho. Una lastima, porque la calidad educativa y el rol de la educacion como parte de la formacion de valores, se necesita de mejores salarios pero no solo con eso se logra.

Rafa dijo...

Fabricio:
Efectivamente, la derogación de la nefasta Ley de Educación Federal del '95 es un paso positivo pero aún falta muchísimo por hacer.

Lo que contás sobre el debate educativo en tu ciudad muestra una de las consecuencias de las políticas neoliberales de ajuste perpetuo: los ciudadanos, entre ellos los docentes, terminan preocupándose ante todo por su propia supervivencia y dejan de lado la cosa pública. Hace poco leí un testimonio de una reunión de allá por 2001-2002 donde una docente le decía a una supervisora: "Nos decían que teníamos que aprender a convivir con el hambre y la pobreza de los chicos, ahora nosotros también somos pobres. Antes que nada, decime cómo resuelvo eso."

Por supuesto que en ocasiones como la que mencionás también aparecen los intereses personales y de grupo. Superar eso es parte de la reconstrucción social que está pendiente, para eso se necesita que cada vez más ciudadanos se interesen en participar.

Gracias de nuevo, un abrazo.

Anónimo dijo...

Jorge:

Pido permiso para dar mi precaria opinión en los que respecta a las ciencias.

A Borón lo tengo muy bien considerado pero creo que le erró bastante en su artículo "No somos Teólogos". Este lunes Página amplió la cobertura con 3 o 4 textos más.

Sinceramente, creo que armar debates del tipo Ciencias duras vs Ciencias blandas es ridículo. Formaría parte de una lucha entre corporaciones que pretenden tener todas las verdades de su parte, como si fueran una especie de "vanguardia de la ciencia".

A mí me tiran las ciencias sociales, pero muchas veces la mirada de un artista y la de un científico(como Paenza por citar uno de los que más aparece) sobre una época ó sobre un contexto político o histórico me ayudó más que un libraco de teoría. Creo, muchachos, que ambas partes deberían tratar de comprenderse más, ya que a fin de cuentas, se supone que deberían ser compañeros de ruta en el camino hacia el desarrollo de un conocimiento aplicado a desarrollo de´la Argentina y al bienestar humano en general(entendiendo por esto a las manifestaciones de la actividad, desde un libro sobre surrealismo hasta la construcción de un dique).

Por otra parte, es innegable que la guita está atrás de todo y que muchos se deben haber sentido un poco amenazados ante lo que ven como una violación a la libertad de cátedra, pero por otra parte es cierto que el nuevo ministerio no tendrá por ahora influencia sobre ellos y sobre sus becas.

En fin, se notará que no conozco demasiado(por ser amable conmigo mismo) del tema, pero siempre sentí admiración por los tipos que laburan en C&T en el país, entre ellos mi tío que labura en el Centro Atómico Bariloche, y que después de hacer una maestría en Canadá volvió para laburar acá.

Che Jorge, no actualice tan rápido che, que los que llegamos tarde nos perdemos el archivo de su blog que está más que bien. Por ejemplo una nota tan buena como esta, sobre todo con respecto a esas palabras que nos roban los perros de la historia, como Patria, Pueblo, Democracia, Nación, Igualdad, Patria Grande, San Martín.(Siguen las firmas)

http://el-lobo-estepario.blogspot.com/2006/12/hablando-de-la-patria-ii.html

Saludos

Rafa dijo...

Julián:
Disculpas por la demora en contestarte. Concuerdo con vos, Borón me merece el mayor de los respetos pero esa nota me pareció fuera de lugar. De paso, el miércoles pasado salieron otros dos artículos que vale la pena leer.

Es como vos decís, armar un debate Cs. "duras" vs. "blandas" es absurdo. Creo que este revuelo que se armó en parte es consecuencia de la falta de un proyecto nacional convocante, lo que repercute en el ámbito cultural y por supuesto también en el de la ciencia y la tecnología. Si ese proyecto existiera, cada área del conocimiento y la cultura tendría su rol y sus objetivos perfectamente definidos y quizás a nadie se le ocurrirían este tipo de debates.

Por ejemplo, a inicios de los '70, cuando se vislumbraba una época de transformaciones profundas, lo que se debatía era "cientificismo" vs. "ciencia y tecnología para la liberación nacional". En la situación actual cada uno tiende a ver las cosas desde su quintita, y no es común que se plantee una visión más abarcadora. Para mí, no tiene sentido plantear una oposición entre distintas áreas del conocimiento, cuando todas deberían tener una función para cumplir en beneficio de la sociedad.

Qué bueno que encuentres cosas que te gustan en los archivos del blog. ¡Y no actualizo tan seguido, che!

Gracias, un abrazo.